Las palabras quedaron ahogadas por tu silencio,
y mis sentimientos murieron por tu indiferencia,
lágrimas amargas corren por mis mejillas,
y mi cuerpo extraña cada vez más tu caricia.
En tu silencio haz guardado mi esencia,
y en tu indiferencia un te amo se murió,
ahora yo me despido tomando otro camino,
para llegar a donde pueda sanar mi dolor.
Tengo tantas ganas de gritar que te extraño,
que muero lentamente por no tenerte en mi vida,
me acostumbré a levantarme de las ruinas,
en las que a quedado mi alma con tu partida.
En el silencio de una partida sin adiós me encuentro,
y en la indiferencia a la que sometes mis sentimientos me quedé,
buscando la salida que me lleve lejos de esta tortura me pierdo,
tratando de alejarme de este sentimiento que duele.
Camino sola y sin deriva, no llego a ningún lugar,
me pierdo en el sabor amargo de eso que llaman soledad,
en el silencio se queda mi voz, no emite ningún sonido,
en la indiferencia se pierde el eco, de aquellos que fueron mis latidos.
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